Con Diana, la mamá jefa, me pasa un cosa. Leo historias, escucho canciones, oigo recitar poemas… e inevitablemente todas esas historias, todas esas letras, me recuerdan a ella. Me refiero a las bonitas, a aquellas que contadas con sensibilidad o crudeza (eso es lo de menos), son capaces de meterse dentro de ti y de navegar por tu interior hasta rozarte el alma con la yema de los dedos. Me pasa últimamente con una canción de César Pop, que pone música a un poema de Luis García Montero: “Ojalá pueda hacerte reír como nadie/ y mucho más que ninguno/ que me veas valiente cuando me acobarde/ y que nunca descubras el truco/ porque el mundo es así/ y vengo herido/ ten paciencia conmigo”. Me ocurre también cuando recuerdo uno de los fragmentos de La flaqueza del Bolchevique, un libro que leí mucho antes de conocerla a ella, pero que tenía una frase que estaba escrita pensando en el día en que mi vida se cruzase con la suya: “Yo no soy nada. Y si fuese algo, dejaría de serlo por ti”.
Me implico en muchos libros y en muchas películas porque entre los protagonistas la veo a ella y siento que de ella me hablan en cierto modo las historias que cuentan. Este post no estaba previsto, pero ayer por la tarde sentí la necesidad de escribirlo cuando iba de camino a casa en el coche. Entonces, escuchando La Ventana, Rubén Pozo y Benjamín Prado mezclaron música y poesía y, por un momento, en mitad del tráfico y de una tarde espesa y nublada, pensé que pagaría por haber tenido a Diana al lado en aquel momento y así, mientras escuchábamos la magia que emitía el dial, cogerle fuerte de la mano, para que se diese cuenta de que en ese mismo instante, en la radio, también había alguien hablando de ella.
Me emocioné mientras conducía escuchando a Benjamín Prado recitar su poema ‘El día en que deje de quererte’, porque por un momento me pareció que hablaba de nosotros. Porque como la letra del poema, yo también pienso que el mundo tendrá que dejar de ser mundo para que llegue el día en que yo deje de querer a esa mujer que me fascinó en cuanto la intuí, me enamoró en cuanto la conocí, y admiré desde siempre, pero muy especialmente desde que se convirtió en madre y me demostró que el amor y la entrega no entienden de agotamiento, ni de noches en vela. Desde hace dos años apenas tenemos momentos para nosotros, pero nos vale acurrucarnos en el sillón, abrazados y agotados, para sentirnos vivos. Y allí, sentados, seguiremos esperando a que “en los cuadros de Goya luzca el sol” o a que “Raskolnikov salga de ‘Crimen y castigo’ a poner unas rosas en la tumba de Dostoievsky”. Hasta que eso ocurra jamás llegará el día en que deje de quererla.
EL DÍA EN QUE DEJE DE QUERERTE
Benjamín Prado
Sé que llegará el día en que deje de quererte.
Todo será tan rápido:
primero pensaré que la vida se acaba,
que nunca fui más lejos que al dejarte marchar;
después
vendrá el olvido.
Estos poemas
hablarán todavía de nosotros
pero de tí y de mí, ya no, ya nunca más.
Cuando África amanezca cubierta por la nieve
y en los cuadros de Goya luzca el sol.
El día en que las águilas se vuelen de los dólares,
Pompeya se despierte
de su sueño a la sombra del volcán,
entonces,
sólo entonces
dejaré de quererte.
El día que no acabe a las doce de la noche.
El día en que el cielo de Marte cubra el cielo
o Raskolnikov salga de ‘Crimen y castigo’
a poner unas rosas
en la tumba de Dostoievsky,
entonces
todo habrá terminado,
no te voy a querer.
Para hasta que eso ocurra,
sólo tú y yo
podríamos
separarme
de ti.
Si tenéis 10 minutos, escuchad el podcast. Es auténtica magia para los oídos. Y habla de ella.
Primeriza en Apuros
Que bonito… cuidad eso vuestro, que se ve de lejos que es especial. Que suerte que os encontraráis en el camino!
Un papá en prácticas
Me siento muy afortunado por haber coincidido con ella en aquel cruce de caminos. Sé que ese tren sólo pasaba esa vez 🙂
Raquel USA
Wow! me has hecho recordar un montón de cosas, así sin quererlo!
Bonito post! sin duda hay que mantenerse unido! Que cansancio ni que cansancio… Toma post Diana! Un abrazo.
Un papá en prácticas
¡Gracias por tus palabras, Raquel! Y qué alegría haberte hecho recordar. Sólo por eso (y por la emoción de la mamá jefa), este post ya tiene sentido 😉
Mamá en Bulgaria
Mira, me has puesto los pelos de punta y me han dado ganas de salir de puntillas para dejaros a solas. Qué bonito leches!
Un papá en prácticas
🙂 ¡Mil gracias, compañera!
Paula
Adrián, estas cosas no se le hacen a una mujer embarazada… Me tienes llorando a lágrima viva
Un papá en prácticas
Llorar bonito es bueno, Paula 😉 Espero que el peque esté mejor. Pobrecillo…
AINARA
Madre mia……Todas llorando estamos!!!!
Un papá en prácticas
🙂 Llorando bonito!
Mamá metalera
Qué suerte que os encontraráis porque salta a la vista que estàis hechos el uno para el otro. Me alegro muchisimo de que esteis tan unidos. Un besote
Un papá en prácticas
¡Gracias mil por tus palabras, compañera!
Roser
Si es que lo digo siempre, especialmente a mis alumnas: los hombres sois la releche! No me extraña que se haya intentado evitar durante siglos que expresarais vuestros sentimientos, porque un hombre enamorado, un padre de verdad, un hijo… en plena erupción es como una madre de parto: algo demasiado poderoso para dejarlo suelto, naturaleza salvaje, arrolladora y omnipotente.
Siempre lo digo a mis alumnas: “los hombres piensan con la entrepierna… hasta que se enamoran de verdad, y entonces… cuando un hombre se enamore realmente de vosotras, os hará sentir las reinas del universo: no le importará que seáis perfectas, guapas, criticonas, gordas… su amor curará todo eso y ante su mirada os sentiréis siempre desnudas y poderosas. Y lo sé por experiencia”.
Un beso a Diana; sabiendo que tiene a su lado a alguien como tú, igual que yo tengo a mi lado a papá, me siento como si la conociera un poco más.
Roser
(Evidentemente, cuando digo esas cosas, mis alumnos, que están también en clase atendiendo al momento de la historia de la literatura en que me salga el arrebato, bajan los ojos, miran el papel y no sé lo que piensan, pero algo piensan seguro y, a veces, alguno asiente con la cabeza: ¡quien tuviera 16 años!)
Un papá en prácticas
Pero qué comentarios más sentidos y molones me dejas, Roser. Gracias, gracias y gracias. Eres un sol!
Sé que tus alumnas recordarán en un futuro esas lecciones que le dabas entre pasaje y pasaje de la historia 😉
yyoconestasbarbas
¡¡¡Eres EL AMO, Adrián!!! Nos dejas a todos a la altura de un mejillón anémico. No sé si hacer una colecta entre el resto de padres simples del mundo para contratar a un sicario y que te “haga una visita” a domicilio, para contarte “un par de cosas”… o hacer una colecta entre el resto de padres simples del mundo y recaudar pasta para contratarte como a Cyrano, para que nos enseñes a contar cosas guapas.
No, en serio… Cuando estás sembrado, estás sembrado, amigo. (Y por cierto… “Crimen y Castigo”… ¡Qué grande! De lo mejor que leí en mi vida).
Un papá en prácticas
¡Gracias, compañero! No acostumbro a estar sembrado, pero de vez en cuando me ilumino y me pongo tierno. Contra eso no puedo luchar 🙂
La Hobbita
:’)
Un papá en prácticas
😀
AMG-mamiblogueando
¡No puede ser más bonita la entrada!y ni me puedo ni imaginar la emoción de la mamá Jefa,como destinataria. De hecho, yo no he podido evitar el nudo en la garganta cuando mi marido y lector tuyo me la ha envíado al sentirse muy identificado.
Y como la cosa va de canciones, ¿qué me dices de “5000 años” de Pedro Guerra? ¡Ufff,los pelillos como escarpias! Love is in the air!;o)))
Un papá en prácticas
¡Hola, Aran! Nunca te había relacionado en los comentarios del blog con Facebook! ¡Mil gracias por tus palabras! No conocía esa canción de Pedro Guerra, pero la acabo de escuchar y me parece maravillosa. Ay! Sí, sí, love is in the air! :-))
Gloria Colli
Ya sabía yo que no me equivocaba al seguir a este chico. ¡Que arte! ¿Que sensibilidad! Una belleza.
Y muy de acuerdo con Roser. Los hombres a veces solo necesitan soltarse para expresar todo lo que siente. ¿Quien dijo que no tienen sensibilidad? Lo que no tienen es su propio permiso para expresarla.
Genial Adrián. Enhorabuena.
Un papá en prácticas
Ay, muchas gracias, Gloria. Me hacen mucha ilusión tus palabras. Poco a poco nos vamos soltando cadenas 😉 ¡Un abrazo!
Carmen
GUUUUUUAAAAAAUUUUUUUU!!!! simplemente me encanta!!!!!!!!!
Un papá en prácticas
¡Gracias, Carmen! <3
Y, además, mamá
Ay Adrián, eres un romántico total. No se quejará Diana, estoy segura de que sabe lo bien que le quieres 😉
Un papá en prácticas
Lo reconozco, soy un romántico empedernido. Vine al mundo así, de serie 🙂
Sonia (la mamá de Álvaro)
Llorando me tienes. No puedes escribir cosas tan bonitas, hombre, piensa en todas las recién paridas con las hormonas revueltas que te leen!
Que suerte tiene Diana de tenerte.
Un besazo, familia
Un papá en prácticas
Muchas gracias, Sonia! Llorar puede ser también bonito 🙂 Espero que estén yendo bien estos primeros días de bimaternidad 😉 ¡Un besazo!